miércoles, 27 de noviembre de 2013

Colección Masaveu: Del Románico a la Ilustración. Imagen y Materia'



Obras de Murillo, El Bosco, El Greco o Zurbarán se darán cita desde este viernes y hasta el 25 de mayo en la exposición 'Colección Masaveu: Del Románico a la Ilustración. Imagen y Materia' que acoge CentroCentro (sala de exposiciones del Ayuntamiento de Madrid). El espacio se convierte así en "un Museo del Prado en esencia", lo ha definido la alcaldesa, Ana Botella, en una rueda de prensa posterior a la Junta de Gobierno.

Organizada por la Fundación Mª Cristina Masaveu Peterson y CentroCentro Cibeles, la muestra representa una oportunidad única para contemplar por primera vez una selección de las mejores obras maestras de los siglos XII al XIXque atesora la Colección Masaveu, uno de los fondos artísticos privados más importantes de España.

La muestra reúne pinturas y esculturasque por su variedad de formatos, heterogeneidad de procedencias y extraordinaria calidad permite crear un auténtico museo temporal de la imagen entre el Románico y la Ilustración, hasta ahora nunca expuesto. Algunas de las obras no han sido exhibidas desde hace más de una generación y aunque muchas han concurrido a exposiciones temporales, será la primera oportunidad de contemplar reunidas tantas obras y de tanta calidad de la colección.

La exposición concentra un total de 63 piezas y entre ellas se pueden admirar desde anónimos maestros medievales hasta obras de consagrados artistas: 'Virgen con el Niño' y 'Santo Domingo de Guzmán', de Murillo; 'Santa Catalina' y la 'Inmaculada Concepción', de Zurbarán; y 'San José y el Niño', de Alonso Cano.

También se podrá contemplar 'Las tentaciones de San Antonio', de El Bosco; 'El Expolio de Cristo y Santa María Magdalena', de El Greco; así como un selecto grupo de pinturas flamencas, italianas o alemanascomo el 'Tríptico del Descendimiento', de Joos van Cleve el Viejo; y 'El campamento de Holofernes', de Mathis Gerung.

Con esta muestra, CentroCentro da continuidad a la serie 'Mecenazgo al servicio del arte' que se inició con el proyecto 'El legado Casa de Alba' y la Colección Helga de Alvear. El arte del presente, que tiene como objetivo acercar al público algunas de las colecciones de arte más relevantes de España.

La muestra se puede visitar de martes a domingo, de 10 a 20 horas. El precio de la entrada es de 6 euros, aunque hay descuentos para mayores de 65 años, estudiantes, personas con discapacidad, familias numerosas, menores de 6 a 12 años y desempleados. El acceso será gratuito el primer martes de cada mes de 10 a 14 horas.

 elMundo.es

lunes, 25 de noviembre de 2013

Pompeya de nuevo en peligro

Pompeya se cae de nuevo a pedazos

Dos nuevos derrumbes en el área arqueológica suscitan críticas y polémicas. El proyecto de salvación de la zona, cofinanciado por la UE, avanza despacio.

La noticia, por desgracia, ya no es noticia. Porque los derrumbes en Pompeya en los últimos años se han convertido en un evento demasiado habitual. Más aún en noviembre: este mismo mes, hace tres años, se vino abajo la Schola Armatorum. Y hace tan solo tres semanas, el 4 de noviembre, se derrumbó parte de un muro de la llamada casa 21. Ahora, como informan los principales medios italianos, les ha tocado a uno de los principales edificios de Pompeya, la Casa del Torello de Bronce: un trozo de estuco de un metro por 50 centímetros se ha caído de una bañera de peristilo. Y no solo: en las cercanas termas centrales se ha abierto una brecha de casi dos metros en uno de los muros.

Al parecer, fue un guardia en su habitual ronda de control quien avisó de los derrumbes. "Se ha abierto una brecha de más de dos metros por uno en el muro posterior de las termas. Se trata del mayor conjunto termal del área arqueológica, que ocupa toda una insula [un tipo de edificio cuadrangular]. Estamos hartos de repetir que se podría haber evitado con un mantenimiento ordinario. Por desgracia parece que nadie escucha y el resultado es que cada vez más áreas se vuelven inaccesibles para los turistas", han asegurado en una declaración conjunta los sindicatos Cisl y Uil.

El área arqueológica lleva años sufriendo derrumbes. De hecho, precisamente para detenerlos el gobierno del entonces presidente Mario Monti puso en marcha el año pasado el bautizado como Gran proyecto Pompeya que, con la colaboración de la UE, debería aportar 105 millones de euros a la conservación de la zona. Sin embargo, como aclara el diario económico Il Sole 24 ore, el proyecto avanza despacio: por un lado, sigue a la espera que sean nombrados su director y subdirector general y, por el otro, tan solo han arrancado cinco de las 30 obras previstas.

Los medios italianos señalan también que las enésimas malas noticias para Pompeya coinciden con el estreno en las salas de Italia de Pompeya, un filme producido por el British Museum y basado en la exposición Life and death in Pompeii and Herculaneum, que cuenta la vida de ambas ciudades antes de la erupción del Vesubio del 79 d. C.



elPais.com

Enviado desde el iPhone de Carlos Lozano

jueves, 21 de noviembre de 2013

Nuevos hallazgos funerarios


No se conocía en España hasta ahora un modelo funerario como el descubierto en una cueva de las afueras de Barcelona: cuerpos inhumados hace 6.400 años siguiendo un rito inédito hasta ahora en estos pagos. Un sorprendente conjunto de inhumaciones lo ha puesto al descubierto en Begues, un pequeño pueblo de montaña situado en la segunda corona metropolitana de Barcelona.

Los restos inhumados de cuatro individuos (un adulto de unos 50 años y 1,55 metros que sufría, al parecer, una severa artrosis vertebral y un tumor óseo; dos adolescentes, y un niño) del Neolítico medio inicial fueron dispuestos en posición fetal, alineados en círculo a un metro de distancia entre sí, reposados en el lado derecho de su cuerpo, encarados a la entrada de la gruta, siguiendo el contorno de la pared norte de la propia cueva. Junto al adulto, se han hallado trozos de animales domésticos muertos y un ajuar fúnebre compuesto por un vaso con dos asas (probablemente, para beber cerveza) y un colgante de hueso bajo su brazo izquierdo con una perforación para sostenerlo.

Práctica de dos siglos

Calculan los expertos que esta práctica funeraria duró en torno a dos siglos. El sistema aprovechaba un hueco en la superficie de una caverna dedicada en exclusiva al uso fúnebre, pues los residentes "pasaban la mayoría del tiempo en la terraza y el porche de la cueva, que era oscura y tenebrosa", según los investigadores. Antes de ser inhumados, siempre bien aseados, los cadáveres eran atados con cuerdas en brazos y piernas para, a continuación, ser envueltos con una mortaja.
La manera de inhumar los cuerpos (nunca dejada al azar) era siempre idéntica. Los sujetos eran sepultados en posición fetal, como se estilaba en el Neolítico. "Para ellos, la posición en que naces era también con la que te ibas de la Tierra", explican los investigadores.

Restos de animales domésticos

El resto de media cabra de unos tres años de edad, hallado sobre el pecho de uno de los cuatro esqueletos humanos, "no era en ningún caso comida", señalan con cierto misterio los arqueólogos responsables de la excavación. "Cabe pensar que esas piezas animales, no sólo de cabras sino también de terneros, eran más objetos que otra cosa", explica el arqueólogo Manel Edo, quien está convencido de que los hacedores y beneficiarios de esta manera de sepultar fueron, además, "los primeros en ir a excavar" en la mina de Can Tintoré, en Gavà, en busca de la preciada piedra variscita.
Hoy, transcurridos casi seis milenios y medio desde el conjunto de inhumaciones de Can Sadurní, los restos humanos siguen en la cueva, al alcance del agua de lluvia.
Un accidente hizo posible la conservación de los restos de unos individuos de épocas diferentes que iban siendo colocados, en una suerte de servicio funerario del Neolítico, a medida que avanzaba el intento de necrópolis.
Bendito accidente. Un desprendimiento de piedras desde el exterior de la cueva colapsó la entrada. En consecuencia, se produjo una caída de bloques que provocó que los restos de los sujetos quedasen cubiertos, protegidos.

Modelo funerario diferente

Una mesa y cuatro sillas de camping dispuestas en el interior de la cueva, de tres metros de profundidad y anclada desde hace varios millones de años en una montaña de Begues, configuran una imagen singular para una rueda de prensa, pero la ocasión lo merece: un año después del hallazgo de la figura de cerámica más antigua de la Península Ibérica en la cavidad de Can Sadurní, dos años más tarde del descubrimiento de la cerveza más pretérita de Europa,los arqueólogos han descubierto ahora cuerpos inhumados según un rito funerario de hace 6.400 años que era desconocido hasta la fecha en la península ibérica.
El descubrimiento confirma, según Edo, la existencia de un modelo funerario diferente al de otros lugares "a causa de que aprovecharon las circunstancias de la cueva". Al mismo tiempo, los investigadores han encontrado restos de una hoguera que podría estar relacionada con los rituales de inhumación de los cadáveres en el Neolítico.

Cuevas vivas

Apostados en un andamio situado dos metros por encima de los restos inhumados hallados, los periodistas comprueban que las cuevas están más vivas de lo que parece. "Los muertos siguen aquí, en la cueva", señala Edo, el hombre al frente de un equipo que ha empleado 35 años en el yacimiento de la cueva Can Sadurní. Los muertos ya estaban ahí hace un año, a apenas cinco metros de distancia de la célebre figurita de cerámica, conocida como 'El Encantat de Begues'. Pero nadie lo sabía entonces. La falta de subvenciones por parte de la Generalitat casi deja en el aire el nuevo hallazgo en este lugar de sepultura colectiva neolítica.
De los habitantes del Neolítico en la cueva de Can Sadurní, situada a unos 20 kilómetros de Barcelona, se conocía su afición por los vasos de cerámica y la elaboración de cerveza. El hallazgo ha permitido saber ahora que también eran amigos de los colgantes decorativos, así como de herramientas como hachas y de armas como flechas.

Conjunto de inhumaciones

Edo es el máximo responsable delColectivo para la Investigación de la Prehistoria y la Arqueología del Garraf-Ordal (CIPAG), artífice de un hallazgo en que ha también ha cooperado el Seminari d'Estudis i Recerques Prehistòriques (SERP) de la Universitat de Barcelona. El arqueólogo pide puntualizar un extremo: "Los esqueletos no fueron enterrados, sino depositados tras haber sido inhumados. Así que no sería correcto decir que estamos ante unas tumbas colectivas, sino ante un conjunto de inhumaciones".
Las cuevas fueron utilizadas como lugar de entierro colectivo hasta que, hace 4.000 años, los cuerpos empezaron a sepultarse bajo tierra y de forma individual. El arqueólogo zanja su explicación con una broma: "Ojalá pudiera saber la causa de las muertes de los cuatro individuos, pero no se les hizo la autopsia".
 

viernes, 15 de noviembre de 2013

La Guardia Civil rescata 2.000 piezas arqueológicas en Valencia


Pertenecen a yacimientos iberos y romanos de la Sierra de Chiva. Detiene a una persona por delito contra el patrimonio cultural.
Con 2.000 piezas rescatadas, producto de 60 excavaciones que habrían ocasionado daños por valor de 120.000 euros, la operaciónSertorius es el mayor golpe asestado por la Guardia Civil de Valencia contra el expolio en yacimientos arqueológicos de la provincia desde 2001.
Así lo aseguraba este jueves la Guardia Civil al dar a conocer públicamente los resultados de los trabajos efectuados los dos últimos meses en la Sierra de Chiva. La operación, que recuerda el nombre de un célebre militar romano que encabezó una rebelión desde Hispania contra Roma 89 años A.C., entró en su fase decisiva el pasado día 11 de noviembre con la detención de una persona 24 años y la imputación de otra de 59, de nacionalidad española. Desde entonces, agentes de la Guardia Civil de Chiva han conseguido recuperar más de 2.000 piezas arqueológicas tras registrar dos viviendas. Entre el material rescatado hay tanto piedras de molino de origen prehistórico, ibero y romano, como monedas romanas, medievales e iberas, además de piezas de cerámica prehistórica e ibera, entre otros objetos y fragmentos.
Sertorius arrancó en octubre con acciones de vigilancia rural para esclarecer un posible delito de expolio en yacimientos arqueológicos de la Sierra de Chiva. La Guardia Civil identificó, localizó y detuvo a una persona que se dedicaba a excavar en yacimientos en parajes montañosos ubicados en el los términos municipales de Gestalgar, Bugarra, Pedralba y Chiva.
Esta persona utilizaba un detector de metales para localizar objetos en el suelo y subsuelo y, posteriormente, realizar excavaciones con una azada. Normalmente actuaba por las noches durante los fines de semana, a veces ayudado por su padre.
Los presuntos saqueadores se movían en motocicleta y actuaban tanto en yacimientos catalogados como inéditos, según expertos en la materia referidos por la Guardia Civil, por lo que previsiblemente habrán perjudicado, y en todo caso condicionado, la investigación arqueológica relacionada con ellos.
Dentro de este operativo y según las investigaciones realizadas por la Guardia Civil, se han podido esclarecer hasta el momento, 60 delitos contra el patrimonio, tantos como excavaciones. Esperan elucidar más hechos a medida que avancen las investigaciones. No se descartan más detenciones. En el curso de los registros, la Guardia Civil también intervino en uno de los domicilios tres botes de cristal con algo más de medio kilo de cogollos de marihuana, perteneciente a otro miembro de la misma familia. Tanto el detenido por un delito contra el patrimonio históricos, como los dos imputados han pasado a disposición del Juzgado de Instrucción número 2 de Requena.

http://elpais.com/ccaa/2013/11/14/valencia/1384439798_384295.html



jueves, 14 de noviembre de 2013

Todo Ana Frank

Ana Frank (1929-1945), la autora del famoso Diario, escribió también numerosas cartas, relatos y poemas durante su corta vida. En su escondite de Ámsterdam, donde intentó ocultarse de los nazis con su familia entre 1942 y 1944, la cronista más reconocible del Holocausto soñó con hacerse un hueco en la literatura una vez concluida la II Guerra Mundial. Durante un tiempo, también llenó una libreta, que llamó Diario de Egipto, con recortes de una revista de arte. Una producción literaria y epistolar abultada -varias de sus cartas y el diario ilustrado permanecían inéditos- que ha sido reunida por primera vez en un solo volumen por el Fondo Ana Frank, de Basilea, y la editorial holandesa Prometeus.

Titulado simplemente Anne Frank, Verzameld Werk (Obra completa) y de 710 páginas, ha sido presentado este martes en la biblioteca judía Ets Haim, la más antigua del mundo. Abierta en Ámsterdam, allí ha recibido el primer ejemplar la ministra de Cultura, Jet Bussemaker, que ha calificado elDiario de Ana Frank de "memoria viva de la II Guerra Mundial". "Es el documento más importante de la contienda", ha añadido. El compendio incluye fotos de la niña, su familia y entorno, así como varias versiones delDiario. Una obra escrita en una libreta con tapas de tela que ella llamó Kitty, y rehízo en 1944 cuando oyó por la radio que piezas como la suya serían recopiladas tras la contienda. El primer borrador, la versión mejorada y la edición publicada en Holanda en 1947 aparecen juntas en el nuevo libro. "Todo ello muestra el talento de la escritora, que venía de una familia inclinada también a las letras. Algo no tan frecuente entre los jóvenes de hoy", según los editores.

El Fondo de Ana Frank fue creado en 1963 por Otro Frank, su padre y único superviviente de los ocho escondidos de Ámsterdam. Ostenta los derechos de la obra de la niña, que en su Diariodejó escrito lo siguiente: "Sabes Kitty, lo que más me gusta es que al menos puedo escribir mis sentimientos y pensamientos. De otro modo me asfixiaría". En 2009, su obra manuscrita fue incluida por la UNESCO en la lista de documentos considerados patrimonio mundial.


Todo Ana Frank - Vía EL PAÍS iPhone
http://elpais.com/cultura/2013/11/13/actualidad/1384332233_087140.html


martes, 12 de noviembre de 2013

Life on the Inside

Archaeology Magazine

 

Camp Lawton had been on the mind of John Derden, a professor emeritus of history at East Georgia College, for decades, ever since he visited Magnolia Springs State Park in 1973. The Georgia Department of Natural Resources had turned the springs, which produce seven million gallons of crystal-clear water a day, into a state park in 1939. Some 200 miles southeast of Atlanta, Magnolia Springs is also the location of Camp Lawton, a surprisingly undisturbed Civil War site, where Confederate forces, for a brief time, imprisoned Union enlisted men.

 

"When I made that first visit, I saw a tablet in the park about the camp," Derden recalls. He discovered that some rudimentary archaeological surveys—a few shovel tests over the years—had essentially turned up no remains from the nineteenth century. Only some of the surrounding earthworks, where manned munitions had been mounted and aimed menacingly toward the prison population, still stood. Derden, like pretty much everyone else, assumed no significant remains were left to help advance any chronicle of the camp and its inhabitants.

 

Nonetheless convinced of a worthy narrative, Derden plugged away at putting one together, relying on other sources, such as diaries and letters from the time, including the drawings and accounts of Private Robert Knox Sneden, a Union prisoner in the camp. Derden's research revealed that Camp Lawton, a functioning prison for only six weeks, would end up being burned to the ground at the hands of Union General William Tecumseh Sherman in December 1864 as the Civil War drew toward its end. The prison had held upwards of 10,000 individuals on more than 42 acres fortified by an imposing pine-log stockade. Of those 10,000 Union prisoners, more than 700 died during their brief time at Camp Lawton. The survivors were evacuated in a hasty nighttime maneuver just one month before Sherman swept through the region. After these events, the camp was pretty much forgotten.

 

Derden's scholarship resulted in a completed manuscript, The World's Largest Prison: The Story of Camp Lawton. As it was about sent to the publisher in 2010, in an interesting twist, Derden and other historians, archaeologists, Civil War buffs, and locals were stunned to learn that Kevin Chapman, a graduate student at nearby Georgia Southern University, just 40 minutes down the road from the site, not only had discovered intriguing Civil War–era artifacts, but also had successfully located pieces of the prison's burned stockade wall. As news hit The New York Times, CNN, and other national outlets, Derden had just enough time to tuck a final chapter into his book. Excavation of the site then cranked into full gear, led by Lance Greene, an assistant professor of anthropology at Georgia Southern, with Derden serving as an ad hoc adviser and expert. Archaeological evidence can now be brought to bear on nuances of daily subsistence in a community that existed for a mere month and a half in the fall of 1864. "This might be the last chance to look at a debate that still rages," says Greene. "Who was to blame for dying prisoners? Were Confederates trying to starve them out?" Looking for answers to these questions is just a piece of the effort. The archaeologists are also searching for clues as to whether life was better or worse, depending on which side of the stockade wall a person found himself.

 

http://archaeology.org/issues/109-1311/features/1424-camp-lawton-civil-war-sneden-pows